sábado, 23 de julio de 2011

Bye, bye, AMY.


Hoy, día 23/07/2011, a las 16:00 horas se notifica la muerte de mi cantante favorita, en su lucha ganó la droga.
La conocí hace algún tiempo por casualidad, antes que mucha gente que me rodeaba, cantaba "Fuck me pumps", de su primer disco Frank, me enganchó y unos años después me alegró escucharla con "Rehab" y "You know I'm no good" en la radio, de su álbum "Back to black".
No me había pasado esto nunca..., llorar por alguien a quien no conozco en persona, que me afecte así una muerte que no es cercana me impresiona.
Esta noche hago mi particular homenaje a la heredera de Billie Holiday, a mi diva, a mi Amy, cantando junto a ella (con menor gracia) las canciones que tanto significan para mi, que tanto disfrute me han dado.Un post para ella.
Su pesar está aliviado.
Descansa Amy.


Más vídeos.

domingo, 17 de julio de 2011

3 iniciales o 4... Juste une nuit.

Sólo una noche.
(Domingo, 17 de julio, 2011).


Nos duchamos juntos, la primera vez que lo hacía, estaba rojo de la vergüenza, nos enjabonábamos, nos mirábamos, me sonreías y yo me avergonzaba. El agua recorría todo nuestro cuerpo, era uno sólo en ese instante. Tus manos, como el agua, viajaban por mi pálido y delgado cuerpo. Al salir nos secamos el uno al otro, me besaste la frente rebosando ternura y yo te besé la mano mostrándote mi amor y mi respeto. Me diste la mano y caminamos descalzos, con la toalla enrollada en la cintura, hacia la habitación. Una tenue luz apenas iluminaba toda la habitación y un silencio casi sepulcral inundaba la casa, me paraste, agarraste mi cabeza entre tus manos y observaste mi rostro, besaste mis jóvenes labios, te encantaba verme con esa iluminación…, tu mirada era tan potente y sincera que apenas podía yo aguantarla, me causaba rubor.
Comencé a temblar de frío, me pasaste la toalla por la cabeza una última vez y, uno al otro, nos ataviamos con dos simples calzoncillos. Me abrazaste hasta llegar a la cama, allí, tu brazo sobre mis hombros, mi mano izquierda asía la tuya, tu mano derecha acariciaba suavemente mi cara, la mía, tu pecho…
Nos mirábamos de vez en cuando, nos besábamos también, no era el turno de las palabras, acalladas por el palpitar de nuestros corazones, era tiempo de mutismo, de amor, amor sentido, amor demostrado más que dicho. Se nos hizo tarde y el alba llamaba a nuestra ventana, otra noche en vela juntos.
Dormimos…
Al despertar con el radiante sol del mediodía inundando la habitación no te sentí a mi lado, tu zona al tacto estaba fría, abrí los ojos, la habitación no parecía la misma, estaba confundido por el recién despertar…, la habitación no era la azul de anoche. No estabas a mi lado, entonces comprendí, me di cuenta. Todo lo que nos pasó anoche, sólo lo había yo soñado.
Soñé, dormí, desperté…, lloré.