lunes, 26 de abril de 2010

Una leyenda que me gusta. Gracias AraC.


Cuenta la leyenda que una vez una serpiente empezó a perseguir a una luciérnaga. Esta huía rápido y con miedo de la feroz depredadora, y la serpiente no pensaba desistir.
Huyo un día, y ella no desistía, dos días y nada...En el tercer día, ya sin fuerzas, la luciérnaga paró y dijo a la serpiente:

- ¿Puedo hacerte una pregunta?
- No he tenido este precedente con nadie, pero como te voy a devorar, puedes preguntar...
- ¿Pertenezco a tu cadena alimenticia?
- No.
- ¿Yo te hice algún mal?
- No.
- Entonces, ¿Porqué quieres acabar conmigo?
- Porque no soporto verte brillar...

Esta última frase nos invita a pensar en la razón por la que muchos de nosotros nos hemos preguntado ¿Porqué me pasa esto si yo no he hecho nada malo?...sencillo, porque no soportan verte brillar. la envidia es el peor sentimiento que puede sentir el ser humano.

Es bueno recordar que aunque nos hieran, no podrán tocarnos, porque nuestra luz seguirá intacta, nuestra esencia seguirá por siempre, pase lo que pase.

"Siempre le viene bien al hombre un poco de oposición. Los cometas se levantan contra el viento, no a favor de él".

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Me ha gustado muchísimo la fábula. No la conocía, pero en un país donde la envidia es el deporte nacional, creo se le puede aplicar a más de uno. Un saludo.

teologiadeS dijo...

Preciosa fabula preciosa y además muy didáctica un saludo!

Elliot JimMe dijo...

Muchas gracias a los dos por los comentarios. La verdad que es un muy fiel reflejo de la sociedad. Abracillos.